Invitando al Espíritu Santo a Tu Vida

Jim Cymbala

Jesus dijo: “Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra” (Hechos 1:8).

El Espíritu Santo es el agente de Dios en la tierra, sin embargo, es el miembro menos entendido, menos predicado y menos mencionado de la Trinidad. Y eso es triste porque sin él, nuestra vida espiritual se convertirá en una lucha seca y mecánica. No hay nada que cambie tu vida de oración, tu estudio de la Palabra de Dios y tu experiencia durante la adoración en la iglesia más que invitar al Espíritu a unirse a ti de una manera nueva.

Ejemplos de la obra del Espíritu Santo a menudo aparecen en los relatos de la iglesia primitiva. Desafortunadamente, hoy muchos de nosotros nos hemos acostumbrado a prescindir de la poderosa presencia del Espíritu Santo obrando en nuestras vidas e iglesias. Considera estas preguntas honestas:

  • ¿Cuántos cristianos sufren de una vida espiritual que es seca y mecánica?
  • ¿Cuántos sirven a un Jesús que conocen por la Biblia, pero no por una realidad viviente en su experiencia?
  • ¿Nos preguntamos alguna vez por qué las intervenciones del Espíritu Santo son tan escasas en nuestras congregaciones?
  • ¿Podríamos estar perdiendo maravillosas bendiciones preparadas para nuestras vidas porque no estamos apropiadamente familiarizados con la persona y la obra de Dios Espíritu Santo?

Sólo hay una cosa más poderosa que ver al Espíritu obrar en la vida de otra persona; y es verlo obrar en la tuya. Si quieres tener poder, confianza, gozo, paz y más amor en tu vida, pídele al Espíritu que venga y haga algo nuevo en ti.

Todo lo que leemos sobre la iglesia en el Nuevo Testamento se centraba en el poder del Espíritu Santo obrando en los corazones de los creyentes cristianos. Ellos creían en la palabra de Cristo, esperaban que el Espíritu hiciera grandes cosas; y él cumplió lo prometido. Y la buena noticia es: ¡Él hará lo mismo por ti hoy!

Jim Cymbala comenzó la iglesia Tabernáculo de Brooklyn, con menos de veinte miembros en un pequeño y deteriorado edificio en una parte difícil de la ciudad. Nacido en Brooklyn, es un viejo amigo de David y Gary Wilkerson.