En 2 Timoteo 4:10, Pablo escribe: “Porque Demas me ha desamparado, amando este mundo, y se ha ido a Tesalónica”. Demas solía viajar con Pablo. ¿Cómo viajarías con Pablo y verías los milagros y escucharías a ese hombre predicar y luego lo abandonarías?
La Biblia dice claramente: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él” (1 Juan 2:15).
No hay patrón de espera con Dios. Tú puedes empezar la carrera, pero aun así, debes acabarla. Eso no es legalismo; eso es solo escritura. Si no estamos creciendo, entonces estamos retrocediendo. O estamos creciendo, acercándonos a Dios y aprendiendo más; o nos estamos deslizando hacia atrás y nuestros instintos cambiarán por completo.
Puedes ver eso en la historia de diferentes denominaciones. Comenzaron en llamas y no tenían ni 10 dólares para contar. Ahora tienen millones y propiedades, y son un caparazón. Son inteligentes, pero están vacíos. Tú lo sabes, y yo lo sé, y todo el mundo lo sabe. Hablan de los 'buenos viejos tiempos', pero ¿por qué? Porque saben que ya no es así.
Así que, aprendemos que todos tenemos que seguir creciendo. Debemos seguir siendo desafiados. Necesitamos estar cerca de otros creyentes que nos impulsen.
La Biblia dice: “Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, [Jesús] salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba” (Marcos 1:35). ¿Acerca de qué estaba orando Jesús? ¡Él es el Hijo del Dios viviente! Él es la Palabra, las promesas encarnadas, y aun así estaba orando. Pero nosotros ¿’no tenemos tiempo’ para aferrarnos a las promesas de Dios?
Jesús les dijo a sus seguidores: “Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá” (Mateo 7:7-8).
Si no se pide, no se recibe. Si no hay oración, te desviarás rápidamente. Avanzamos hacia Dios o nos alejamos.
Jim Cymbala comenzó la iglesia Brooklyn Tabernacle con menos de veinte miembros en un pequeño y deteriorado edificio en una parte difícil de la ciudad. Nacido en Brooklyn, es un viejo amigo de David y Gary Wilkerson.