El Sencillo Evangelio de Cristo

Joshua West

La carta de 1 Juan fue escrita a un grupo de creyentes que se encontraban en un clima difícil. A medida que el cristianismo se extendía, encontraba la oposición de una cultura religiosa que era muy inclusiva. El mundo grecorromano estaba "abierto" a muchas filosofías diferentes y tenía un punto de vista panteísta en el que todas las creencias e ideas podían combinarse.

El cristianismo es monoteísta y muy exclusivo. Ahora bien, ser exclusivo no significa que no seas bienvenido debido a tu origen étnico o tu historia. No, en absoluto. Más bien, el cristianismo hace una declaración de que Jesucristo es el único camino a Dios y que la revelación que recibimos en las Escrituras es todo lo que necesitamos para una vida en Dios. Es una declaración muy simple y llana, y no puede fusionarse con ninguna otra religión. O es completamente cierto o es completamente falso.

Aquellos en la iglesia primitiva que habían llegado a la fe salvadora en Cristo tuvieron la tentación de intentar fusionar sus nuevas creencias con los ídolos de su cultura. Juan estaba escribiendo y hablando fuertemente contra aquellos que predicaban mensajes falsos de que los principios del cristianismo podían mezclarse con las creencias de la cultura. Él destacó este punto a través de la asombrosa yuxtaposición entre la luz y la oscuridad.

Si estás en una habitación oscura y alguien enciende una cerilla o fósforo, esa luz es innegable. Nunca será confundida con la oscuridad.

Lo que afirma el cristianismo no puede confundirse ni mezclarse con nada más en el mundo.

“Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad; pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado” (1 Juan 1:5-7).

Traemos el pecado a nosotros mismos, pero un día resucitaremos en un mundo restaurado debido a lo que Jesús hizo en la cruz. Ésta es la gran esperanza que tenemos en Cristo y su mensaje. No hay otra manera.