Satanás está tratando de plantar mentiras en tu mente en tu tiempo de debilidad y problemas. Él tratará de convencerte de que Dios no está contigo. Si crees esa mentira, nunca podrás escapar de la trampa de Satanás.
Si callas ante el Señor y lo invocas en oración secreta, el Espíritu Santo te dirá claramente que Dios está contigo y no te ha abandonado. Él te ve y está esperando que entres en sus planes para tu vida. La Biblia nos dice que cuando los discípulos dudaban y estaban confundidos, “Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:18-20).
Eres amado y eres necesario. Satanás es un mentiroso, esperando que cedas a la desesperación creyendo que estás solo en tu lucha. No, nunca estás solo. El Espíritu Santo está intercediendo por ti en tu momento de necesidad. “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos” (Romanos 8:26-27).
Vas a salir victorioso de tu prueba, pero debes creer que Dios ha oído tu clamor. Solo apóyate en el Señor.
Este es el corazón de Dios para su pueblo en medio de sus pruebas mientras estaban cautivos en Babilonia: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón” (Jeremías 29:11-13).