¿A Dónde Podemos Hallar Aliento?

David Wilkerson (1931-2011)

¿Dónde puedes encontrar cristianos totalmente dedicados al Señor que tengan una vida fácil y sin problemas? Muéstrame un seguidor de Cristo lleno de Dios y guiado por el Espíritu, y yo te mostraré uno que es perseguido, castigado, a menudo desconcertado y bien familiarizado con las aguas profundas y los hornos de fuego.

Los que tratan de evitar las dificultades rara vez obtienen la revelación de la plenitud de Dios. Intentan usar la fe para librarse de la crisis, sin darse cuenta de que se están robando la mayor oportunidad de descubrir de qué están hechos. Entonces, un día, cuando los problemas inevitablemente aparecen, se derrumban, sin tener una fuente comprobada de fuerza interior.

En su carta a los Efesios, Pablo oró, “para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu” (Efesios 3:16). Él estaba diciendo que el Señor necesita cristianos que no sean sacudidos por todo viento y ola de doctrina; que tengan discernimiento; que no estén buscando al próximo maestro carismático con una "nueva revelación"; y que no dependan de otros para su felicidad y fortaleza espiritual. Él necesita personas que hayan sido probadas y demuestren que la misma vida de Dios está en ellos. Que obtengan su sustento de su hombre interior que ha renacido por la gracia en Cristo Jesús.

Podemos aprender lecciones valiosas de la experiencia del rey David cuando él y sus hombres se encontraron con la devastación total que dejaron los amalecitas en Siclag. Aunque su corazón estaba angustiado, “David se fortaleció en Jehová su Dios” (1 Samuel 30:6). Es imperativo que también sepamos cómo animarnos en el Señor para estar preparados cuando los problemas se presenten en nuestro camino.

Hermanos en Cristo, les ruego que abran sus ojos al gran poder de Dios que obra en ustedes, y que se apropien de la plenitud del Señor Jesucristo. No importa en qué horno de fuego seamos arrojados, nuestro Dios nos guiará a través de él.