Las Preciosas Promesas de Dios

Jim Cymbala

¿De dónde viene la corrupción y los problemas en el mundo? Proviene de los malos deseos de las personas depravadas. Incluso los cristianos lidian con los malos deseos que quieren aparecer en sus vidas. Hay corrupción en el mundo, pero Dios dijo: “He enviado a mi Hijo al mundo para que no solo tengáis vida eterna, sino también para que seáis salvos de la maldad que hay en el mundo” (ver Juan 3:16). ¿Cómo echamos mano de esta libertad?

Veamos la vida del gran hombre cristiano de fe George Muller. Él dirigió orfanatos y fue llevado peculiarmente a no pedir fondos. Simplemente confió en Dios a través de la oración y la fe para ver todas las necesidades suplidas. Muller dijo una vez: “No puedo pasar el día con todas mis responsabilidades sin comenzar el día con Dios en su Palabra. Ni siquiera puedo orar efectivamente hasta que tenga fe, pero la fe viene por oír la Palabra de Dios”.

En la Biblia hay mandamientos, narrativa histórica, poesía, cantos de adoración, pero también hay muchas promesas que Dios está haciendo. Cada parte de la Biblia es importante, pero ¿cuáles son las promesas que Dios nos hace, específicamente a ti, en su Palabra?

El apóstol Pedro animó a la iglesia perseguida diciendo: “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia” (2 Pedro 1:3-4).

Al creer en las promesas de salvación de Dios, nos hacemos partícipes de la naturaleza divina. Ahora, no nos convertimos en dioses como afirman algunas religiones de la nueva era, sino que compartimos la naturaleza divina de Dios. ¿Cómo? Confiando cada vez más en Dios y haciendo crecer nuestra fe. Cada vez más, compartimos el poder y la bondad del Espíritu Santo que ha venido a vivir dentro de nosotros. Pedro dijo que ganamos eso creyendo y aferrándonos a las promesas de Dios.

¿Qué tal pedirle a Dios que te dé más sabiduría y disciplina para leer la Biblia y buscar sus promesas?